Se ha dado la circunstancia perfecta para todos aquellos que tenían en mente someterse a un trasplante capilar; si a la alopecia androgénica le añadimos el estrés y la ansiedad que ha generado la situación del confinamiento, se juntan los dos factores clave para que la caída del cabello se haya visto agravada. En el artículo de hoy, el Dr. Mato Ansorena nos habla sobre el
injerto capilar, la intervención más demandada de la desescalada.
Micro injerto capilar o trasplante capilar ¿qué necesitas?
El Dr. Mato Ansorena ha sido pionero y director en la creación del primer Máster de Cirugía Capilar y Tricología en el mundo. En nuestras clínicas contamos con una amplia gama de tratamientos para la alopecia femenina y masculina. Esta afección no entiende de sexos a pesar de que el tema se ha generalizado siempre alrededor de los hombres. Aunque la alopecia sea genética o hereditaria, hay solución para ello.
En primer lugar, se debe realizar un Pre-Diagnóstico Capilar, ya que todas las intervenciones deben ser realizadas a medida.
- FUE (EXTRACCIÓN INDIVIDUAL FOLICULAR)
Esta técnica es la variante quirúrgica más realizada y más avanzada que existe. Consiste en extraer las unidades foliculares una a una para posteriormente, ser implantadas. Es un método mínimamente invasivo: no requiere de cortes ni suturas, por lo que el proceso de cicatrización es mucho más rápido y sin cicatrices visibles.
Consta de dos etapas, en primer lugar, se trata la Extracción de las Unidades Foliculares de una zona donante para posteriormente, implantarlas en las zonas afectadas por la alopecia mediante micro incisiones aleatorias a una profundidad muy controlada. La segunda fase es la Implantación de las Unidades Foliculares, según se extraen las UFs, se van clasificando en Uds. de 1, 2, 3 o 4 pelos, colocándolas en placas de Petri para preservar su supervivencia, hasta el momento de ser colocadas.
Debidamente tratados se procede a implantar las UFs en la zona sin cabello, realizando así, el micro injerto capilar de todas las unidades obtenidas de la zona donante a la receptora.
Mediante un Implanter se automatiza la incisión-colocación en un solo tiempo, controlando la profundidad y eliminando la manipulación de los injertos en el momento de la colocación, aumentando la supervivencia y el crecimiento de las unidades foliculares.
¿Es necesario rasurar la cabeza con esta técnica? “El rasurado total se recomienda sobre todo en la zona donante, ya que es el modo más idóneo para la extracción de unidades foliculares. En el caso de las mujeres, entendemos que son más reacias al rasurado total por lo que únicamente se rasura la parte posterior donde vamos a hacer la extracción de una forma muy localizada, de tal manera que, el pelo de la parte superior tapará esta zona y quedará cubierto, sin que se vean calvas”, responde el Dr. Mato.
La duración del procedimiento suele ser de 6 a 8 horas, ya que dependerá de las unidades foliculares a extraer e implantar.
- FUSS (TRASPLANTE DE UNIDADES FOLICULARES)
El trasplante e injerto capilar con la técnica FUSS es un procedimiento quirúrgico de poca invasividad, ambulatorio, que se realiza bajo anestesia local donde el cirujano extrae una banda occipitotemporal de cuero cabelludo (conocido comúnmente como la tira).
La zona de donde se ha extraído esta tira se prepara para el cierre tricofítico, dicha sutura será retirada en 2 semanas.
Posteriormente se procederá a ejecutar las micro incisiones en la zona que recibirá los injertos. Estas incisiones se realizan con micro-cuchillas especialmente diseñadas, que se adaptan al tamaño y longitud de cada unidad folicular y no con agujas o bisturíes convencionales.
Esta técnica es más sencilla que la técnica FUE, por lo que resulta más económica. El proceso es más rápido. Aunque se trate de una alopecia muy extendida, esta técnica aligera bastante el proceso al ser las UFs extraídas en una tira, en vez de una a una.
“Una vez explicadas ambas técnicas hemos de matizar que los pacientes candidatos/as a la técnica FUSS son aquellos que presentan áreas alopécicas extensas mientras que la técnica FUE es perfecta para quienes presentan pérdidas de cabello limitadas y controladas”, explica del Dr. Mato.
El Dr. Mato Ansorena desmiente los mitos sobre injerto capilar
- Para realizar este tipo de intervención NO es necesario estar completamente calvo. De hecho, si se hace en este caso, conseguir resultados extraordinarios es mucho más difícil. Un gran ayuda para el éxito del tratamiento es contar con pelo en la zona baja de la cabeza ya que de ahí se podrían extraer folículos para los injertos.
- La edad importa, pero no limita. Es un hecho, la mejor edad está entre los 30 y los 40 años, pero los injertos capilares se pueden hacer desde los 18 años a los 90.
- Mi cabeza se verá invadida de marcas o cicatrices. Todo dependerá del tipo de operación, pero si ha sido realizada por profesionales cualificados, las cicatrices probablemente sean inexistentes.
- Mucha gente viene con la misma pregunta: ¿es tan doloroso como he escuchado? El tratamiento de trasplante capilar no tiene porqué producir dolor, de hecho, gracias al uso de la anestesia local los pacientes no sienten dolor o molestias. El postoperatorio tampoco tiene porqué serlo ya que recomendamos y pautamos tomar algún tipo de analgesia. Tras 48 horas, se puede hacer vida normal, tan solo habrá que esperar un mes para poder realizar deporte.
- El pelo que se injerta se cae y no crece, falso. Lo que se trasplanta, es el folículo capilar, no el pelo, lo injertos están genéticamente programados para crecer toda la vida (poseen receptores hormonales que no se ven afectados por la hiperactividad enzimática) y crecerá hasta que lo cortemos sin necesidad de volver a caerse.
Y si aún estás a tiempo, ¿qué tratamientos existen para la prevención de la caída?
La carboxiterapia se utiliza también como tratamiento para la alopecia, normalmente como complemento de otras y siempre haciendo un diagnóstico diferencial de las causas de la misma descartando primero otras patologías.
Esta genera un aumento de la circulación local y del oxígeno en los tejidos, lo que aumenta la nutrición de los folículos capilares y fortalece los mismos, frenando la pérdida del pelo.
Se requieren un mínimo de 4-6 sesiones (15 minutos/sesión) con una frecuencia de 1 sesión a la semana.
La carboxiterapia se puede combinar con otros tratamientos para combatir la alopecia, como las inyecciones de plasma rico en plaquetas y otros tratamientos infiltrativos o tópicos.
“Es innegable que los trasplantes capilares son una tendencia que cada día va a cobrar más fuerza. La imagen influye en el estado anímico de las personas y cada vez tiene más peso en la sociedad. Si alguien sufre el complejo de la falta de cabello ¿por qué no solucionarlo?”, concluye el Dr. Mato.
Si quieres que el Dr. Mato y su equipo médico estudien tu caso para saber si es posible realizarte un injerto capilar y qué método es el más adecuado, no dudes en pedir cita.