Dr. Javier Mato Ansorena Cirugía Plástica, Estética y Reparadora – Codirector del Master en Tricologia y Cirugía Capilar de la Universidad de Alcalá de Henares y Cirujano Digestivo
Seguridad, excelencia y profesionalidad es la combinación que ofrece el Dr. Mato Ansorena a sus pacientes en el marco de su especialidad, la Cirugía Plástica, Estética y Reparadora. Con él hablamos en torno al concepto de envejecimiento y de las técnicas de lifting y lipoestructura.
Dr. ¿Cuáles son los signos más evidentes del envejecimiento facial?
Además de las arrugas, la pérdida de juventud se nota en el rostro con la caída del pómulo, la pérdida del óvalo facial, la aparición de bolsas en los ojos… La pérdida de elasticidad y la aparición de flaccidez hacen que, con el paso de los años, los rasgos queden menos marcados y la cara se adelgace, colgando hacia abajo, debido a la falta de elastina y de colágeno, que con el paso de los años nuestro organismo produce en menor cantidad. Cuando somos jóvenes, el rostro presenta una forma de pirámide invertida, pero con el tiempo se vuelve más cuadrado. Por eso, cualquiera que se mire a un espejo y ejerza una tracción en la cara en sentido un poco vertical, puede comprobar que mejora bastante su aspecto.
Es fundamental entender todo esto para conseguir buenos resultados en los tratamientos, ya sean de Cirugía o de Medicina Estética.
“En Cirugía Estética no hay edades, porque no todo el mundo envejece al mismo ritmo ni de la misma forma”
Cuando todo eso sucede…. ¿la solución sería un lifting?
La solución puede ser, efectivamente, un lifting, con el que debemos conseguir que el paciente se vea mejorado y más joven, pero sin modificar sus rasgos, de manera que se note rejuvenecido y con buen aspecto pero a la vez perfectamente reconocible. Si se nota que hemos hecho una cirugía es que hemos fracasado. Mis pacientes no se ven operados, pero si con un aspecto mucho más rejuvenecido.
El concepto de lifting ha cambiado mucho en los últimos años…
Radicalmente. Antes se estiraba la piel de tal manera que quedaba una cara deformada, antinatural… El efecto del lifting a veces subía la patilla del pelo, quedaba incluso la oreja salida… En definitiva, se alteraban los rasgos faciales.
Para que eso no suceda, el rejuvenecimiento tiene que ser tridimensional, subiendo los tejidos profundos en sentido contrario al de la gravedad.
En mis intervenciones de lifting you actúo a nivel del sistema músculo- aponeurótico, esto es, la musculatura que mantiene la sonrisa, el surco nasogeniano… El objetivo es recolocar todo de forma que quede más elevado. Y en casos en los que, además, advertimos una clara pérdida de volumen, actuamos inyectando grasa en la zona. Es lo que se conoce como lipofilling o lipoestructura.
Estoy realmente muy satisfecho con los resultados que obtenemos en cirugía facial gracias a este enfoque, unos resultados que ya apreciamos incluso en quirófano, durante la intervención: cuando hemos trabajado en la mitad de la cara y, en comparación, vemos la otra media, notamos que está más tensa, que está recolocada. La cara es como un guante que recubre los tejidos musculares y óseos, así que debemos tratar de que ese guante que nos protege del exterior se adapte bien a las estructuras internas.
Como uno de los mejores cirujanos plasticos, ¿considera usted que hay una determinada edad a partir de la que estaría indicada este tipo de cirugía, o no?
No, en Cirugía Estética no hay edades, porque no todo el mundo envejece al mismo ritmo ni de la misma forma. Hay mujeres que con 50 años están estupendas, mientras que otras con 40 muestran ya una importante laxitud en el rostro. Una mujer relativamente joven puede notar que se le está cayendo el pómulo, puede notar pérdida del óvalo facial… No creo que operar entonces sea prematuro. No creo que deba esperar a ser más mayor y verse peor e incluso a mirarse al espejo y no reconocer sus rasgos porque su cara se ha ido deformando. La Cirugía Estética también debe ser preventiva. Si operamos ya, podremos conseguir un cambio más gradual, imperceptible a los demás, y además en personas jóvenes la piel reacciona mucho mejor. El resultado es extraordinario, siempre y cuando la intervención la lleve a cabo un cirujano experto, que realice en torno a 50 liftings al año.
¿Diría que una cirugía a tiempo ayuda a envejecer más dignamente desde el punto de vista estético?
Por supuesto. Hay una serie de cosas que son inevitables y arruguitas vamos a tener todos pero, aunque la carrera del paso del tiempo la tengamos perdida, sí podemos sentirnos bien con nuestra imagen a cualquier edad. Lo horrible es que el paso del tiempo consiga que no te reconozcas a ti mismo. Y eso no significa que tengamos que ser esclavos de la Cirugía Estética.
¿La naturalidad sigue siendo el gran objetivo en Cirugía Estética?
Sí. Una cara nunca debe indicar que se le ha hecho cirugía ni hacer que el paciente parezca una pantomima de lo que era. Tampoco soy partidario de crear bellezas en serie, sino de respetar la individualidad de cada persona y, en base a ello, potenciar encantos. No quiero convertir a mi paciente en una guapa más, sino potenciar la personalidad de sus rasgos. Si todos fuéramos más naturales en apariencia y en comportamiento todo iría mejor…
¿La Medicina Estética sería un complemento de la Cirugía Estética?
Un complemento fantástico. La toxina botulínica, por ejemplo, es magnífica para disimular y hacer desaparecer arrugas; como lo es el ácido hialurónico para recuperar volúmenes e hidratar la piel. Estos tratamientos ofrecen muy buenos resultados, una vez más, siempre que el paciente se ponga en buenas manos y que no se abuse de ellos. Hagamos lo que hagamos, cada persona debe conservar su expresión.